El término logística inversa puede sonar algo confuso, pues, ¿Qué quiere decir invertir la logística? A pesar de lo que pueda parecer a simple vista, este proceso desempeña un papel crucial en la economía comercial de hoy en día. ¿Alguna vez te has preguntado qué pasa con los productos que se devuelven a las tiendas? ¿Y con los deshechos de ciertas empresas? Acompáñame a lo largo de este blog para saberlo.
¿Qué es?
En grandes términos, la logística inversa es el proceso de gestionar el flujo de productos desde las manos del cliente hasta su punto de origen, con el objetivo de devolverlos a su ciclo de producción o para reciclarlos de manera adecuada. A diferencia de la logística que conocemos, esta, en vez de encargarse de llevar los productos desde los fabricantes a los consumidores, trata de lo que ocurre cuando se solicitan devoluciones o cuando los productos ya han sido utilizados.
¿Por qué es tan importante?
Es crucial implementar logística inversa en los negocios por dos principales motivos.
El primero, es el hecho de permitir a los clientes devolver los productos en caso de que este sea defectuoso o no se adapte a sus necesidades. Esto puede favorecer a nuestro negocio y atraer más clientes, ya que se procura darles todas las facilidades posibles para garantizar su satisfacción.
El segundo es el impacto medioambiental de la empresa. Una buena gestión de la disposición de residuos de la empresa puede reducir en gran parte sus emisiones, al igual que mejorar su imagen social corporativa.
Innovación en la Logística Inversa.
Tras haber estado implementando este proceso en las empresas durante mucho tiempo, cada vez más son las ideas y estrategias que surgen para aumentar la eficiencia y productividad del mismo.
Recogida de residuos. Cada vez existen más empresas las cuales son contratadas por otras para que se ocupen de realizar recogidas periódicas de residuos, como por ejemplo las empresas de recogida de RAEE (Residuos de aparatos electrónicos).
Reciclaje eficiente. Con el tiempo, las empresas han comenzado a crear un nuevo paso en el proceso de disposición de residuos. Este proceso recuperar materiales reciclables de productos devueltos, como por ejemplo cartón, papel o plástico para reintroducirlos en la cadena de producción. Este paso "extra" ayuda a disminuir la necesidad de fabricar nuevos materiales y ahorra recursos naturales.
Reacondicionamiento. La logística inversa fomenta la reparación de productos defectuosos en lugar de desecharlos. Una vez realizadas las reparaciones necesarias, se puede devolver al mercado, prolongando su vida útil.
Conclusión.
La logística inversa es un enfoque estratégico para ahorrar recursos, el cuál no sólo beneficia a las empresas si no que también al medio ambiente. Poner en uso las prácticas de logística inversa puede reducir costes, mejorar la imagen corporativa de la empresa e incluso abrir nuevas oportunidades de negocio, como por ejemplo el mercado de reacondicionados. Es hora de que las empresas reconozcan la importancia y las ventajas de este proceso y que lo integren en su funcionamiento.
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